Consecuencias de las falta de médicos

El PP advierte de que el Hospital de Jarrio va camino de convertirse en un ambulatorio

 

Los populares pedirán explicaciones en la Junta al Consejero por los desvíos de pacientes a Gijón, al no cubrir las bajas médicas

 

El Espín (Coaña), Nuria M. REYERO para La Nueva España

 

El Partido Popular de Asturias ha instado al Gobierno regional a «corregir» la situación que atraviesa el Hospital de Jarrio por falta de médicos y acumulación de pacientes en lista de espera. Los populares, con su presidente Ovidio Sánchez a la cabeza, se reunieron ayer en la localidad coañesa de El Espín para protestar por la situación del centro, donde la falta de médicos especialistas en neurología ha obligado a derivar a los pacientes graves al Hospital de Jove, en Gijón. La baja por enfermedad de sus dos neurólogos, uno con plaza fija y el otro contratado, ha provocado una lista de espera de 900 pacientes.

 

Ante este problema, Ovidio Sánchez considera que desde un tiempo atrás, el centro hospitalario oferta servicios que en realidad no se dan y en el cual no se cubren las deficiencias con las que se encuentra, por lo que hay, dijo, «una necesidad de corregirlas y de cubrir todos los servicios para los que fue diseñado».

 

Según Sánchez, la situación vivida en el Hospital de Jarrio puede llevar a la creencia de que el centro comarcal es «un ambulatorio sin más, lo cual genera cierta incertidumbre». A ello se suma la larga lista de espera que se ha creado en el área de neurología tras la baja de sus dos médicos especialistas, la cual ronda en torno a los 900 pacientes. «Da la sensación de que no se quieren cubrir esas plazas», señaló el presidente del Partido Popular de Asturias, quien atribuyó este problema a la imprevisión y a la mala gestión de la dirección del hospital por no tomar las medidas pertinentes ante las dos bajas de los especialistas. «Esa falta de previsión es lo que denunciamos, y queremos que se tomen las medidas necesarias para ello», añadió.

 

El portavoz de Sanidad del grupo parlamentario popular, Carlos Galcerán, puntualizó que desde hace años «denunciamos la precariedad tanto de los recursos humanos como materiales en el Hospital de Jarrio». Las 900 personas que acumula la lista de espera de neurología y la necesidad de derivar los enfermos a otros hospitales demuestran, según Carlos Galcerán, un «gran desinterés e inoperancia» por parte del centro comarcal. Asimismo, atribuyó otra situación de alarma en el hospital en cuanto a la falta de asistencia del personal, ya que no sólo se registra la baja de neurólogos, sino que también «hay un solo cardiólogo y está de vacaciones».

 

La falta de planificación en el uso de los quirófanos fue otra de las quejas comentadas por el portavoz de Sanidad, quien señaló que el comentario general existente en la sociedad es que «el Sespa quiere convertir el centro de Jarrio en un hospital de crónicos».

 

Y añadió: «Exigimos al Consejero que tome las medidas necesarias y pediremos la comparecencia en la Junta General». También estuvieron presentes los tres diputados regionales, Emilio Pérez Cueva, Alfonso Román y Marcial González, quien hizo un llamamiento ante la posible saturación que se puede producir en el hospital asturiano con el uso de la autovía ya que, hoy en día, un paciente de Ribadeo puede llegar en menos tiempo a Jarrio que al Hospital de Burela. «Este problema vamos a medirlo y evaluarlo para que no vaya en detrimento de los pacientes del occidente asturiano», comentó. Román habló del hospital de Jarrio como «uno de los grandes logros sociales de los últimos años».